“Las tres hermanas”, de Chejov, se reinventa en Teatro UC.

Entre el 16 de octubre y el 22 de noviembre, Teatro UC presenta una audaz reinvención de “Las tres hermanas” a cargo de Angelo Solari. En la propuesta, Blanca Lewin, Valentina Muhr, Montserrat Ballarín, Luis Cerda y Rodrigo Pérez compartirán escenario con una serie de avatares creados a partir de sus propias voces y rostros, generando la inquietante sensación de que la familia Prozorov conversa con múltiples versiones de sí misma.
Esta provocación invita al público a pensar en los dilemas universales del ser humano mediante el lente de la virtualidad. A partir del uso masivo de Inteligencias Artificiales (IA) conversacionales, tales como Chat GPT, Angelo Solari se cuestiona con quién estamos dialogando y reflexionando cuando interactuamos con la IA: “¿Hay una otredad en la discusión o somos nosotros mismos quienes estamos conduciendo las respuestas y escuchando lo que queremos escuchar? Y, en esa línea ¿cambia la obra si se reemplaza la materialidad de sus personajes?”.
Para el director, a través del uso de estos avatares la pregunta acerca de los actuales límites de la creación reflexiva queda instalada y conducen a abordar de manera retórica la pregunta no sobre el qué y el cómo reflexionamos, sino sobre el medio por el cual lo estamos haciendo.
Un clásico escrito en partitura
“Cuando han pasado más de 125 años de su estreno, es fascinante ver las mismas inquietudes, los mismos miedos y las mismas felicidades en un mundo que aparentemente es tan distinto”, plantea la directora artística de Teatro UC, Gabriela Aguilera, sobre esta obra presentada por primera vez en el Teatro de Arte de Moscú en 1901, bajo la dirección de Konstantín Stanislavski.
Y aunque los conflictos centrales de la familia Prozorov permanecen en esta nueva versión —el sentimiento de estancamiento y la búsqueda de una vida más plena—, la puesta en escena está impregnada de la veta de compositor de Angelo Solari, quien condensó y organizó el texto dramático como una partitura musical, donde muchos diálogos se transforman en una polifonía de voces que acelera la narración y permite su interpretación en 60 minutos.
Para la actriz Blanca Lewin, quien interpreta a Olga, la mayor de las hermanas, esta manera de trabajar los transforma en una pieza de un puzzle, más que en un actor que tiene que encarnar un personaje: “Es como menos egótico y es más entretenido al mismo tiempo porque, en el fondo, no tengo toda la responsabilidad de que mi escena salga bien, sino que depende de que la máquina funcione”. Asimismo, Luis Cerda, quien interpreta al hermano Andréi Prozorov, plantea que esta manera de trabajar “nos permite una mayor profundización en los estados emocionales o psicológicos que queremos lograr, porque cuando las reglas del juego son así de claras, uno puede profundizar más que cuando las cosas están disgregadas”.
De acuerdo con Gabriela Aguilera, esta puesta en escena permitirá al público experimentar el particular trabajo del director sobre un texto dramático convencional. “Angelo es un compositor tridimensional de la escena y a través de su investigación, logra trabajar con el tiempo, con su sensación, construye la tensión, el significado a través del material sonoro, la atmósfera, el movimiento espacial, corporal, de la luz. Todo era muy acorde al espíritu chejoviano y nos pareció que esta creación artística era estimulante y refrescante en el panorama actual”, puntualiza la directora artística.

 

Ficha artística
Dramaturgia:  Antón Chéjov
Dirección y Composición Angelo Solari
Elenco Blanca Lewin, Montserrat Ballarín, Valentina Muhr, Luis Cerda y Rodrigo Pérez
 Asistente de dirección Pablo Fuentes
 Diseño de escenografía y vestuario Rocío Hernández
Diseño de iluminación y animación digital Diego Muhr
 Operación Multimedia Sebastian Carez
Maquillaje y peinados Carla Casali
 Producción Teatro UC

Coordenadas
Sala Ana González / Teatro UC
Entre el 16 de octubre y el 22 de noviembre,
miércoles a sábado, 20.30 horas,