Las piedras se toman la escena

¿Qué resultaría de imitar a las rocas con el cuerpo de la obra?, ¿cómo sería una obra mineral?, ¿qué podría surgir del proceso de comportarnos como aquellas que nunca han nacido, nunca crecerán y nunca morirán? Son algunas de las preguntas que se hizo la dramaturga y directora Manuela Infante en el proceso de investigación de su nueva obra: “Cómo convertirse en piedra”. Un trabajo de exploración que comenzó en 2018 -en una residencia en el Festival Kyoto Experiment en Japón-, y que actualmente se presenta en Matucana 100.
La puesta en escena, coproducción de Matucana 100 y Fundación
Teatro a Mil junto con Nave y Parque Cultural de Valparaíso, aborda el entorno no humano, la crítica al antropocentrismo y cómo esa figura se apropia y explota aquello determinado como ‘no humano’. ‘Cómo convertirse en piedra’ mira de cerca cómo las formaciones geológicas y los cuerpos humanos comparten historias de explotación y agotamiento. Somos también piedra y también podemos ser minados.
La tarea de imaginar un teatro post-antropocéntrico y no humanista es una idea que la dramaturga nacional ha materializado en sus obras “Realismo” (2016) y “Estado Vegetal” (2017), y hoy también lo hace en “Cómo Convertirse en Piedra” (2020). El trabajo de Infante ha sido contrarrestar la noción moderna de humanidad como medida de todas las cosas, y lo ha hecho por medio de investigaciones que buscan descolonizar las prácticas teatrales del pensamiento humanista. “El concepto de ‘humano’ ha servido para sostener y justificar significativas explotaciones y exclusiones, no solo hacia los no-humanos, sino también hacia los humanos considerados menos que humanos. Un teatro no-humano es una práctica crítica y también, una coreografía especulativa con otras formas de organización social”, señala Manuela Infante.
Trabajando con pedazos de narrativas erosionadas, comprimidas entre sí como capas de materiales sedimentados, la obra presenta una estructura dramática mineral, que nos habla de aquello que está escrito en piedra, y de aquello geológico que podemos encontrar escrito en nosotros. Pedazos de historias erosionadas que se organizan en paisajes sonoros, apilados unos sobre otros por medio de procesos de ‘loopeo’, como capas geológicas de roca, formando un áspero algo.
En la puesta en escena, las rocas (que son cosas no vivas) pueden arrojar luz crítica sobre la hegemonía actual de la retórica de la vida -y lo vivo- arraigada en conceptos políticos y económicos que son preponderantes actualmente como lo es el crecimiento, el progreso, el desarrollo, etc. Una especie de bio-normatividad donde lo vivo opera como una norma que ejerce sus formas específicas de opresión y explotación.
Sobre el estreno de esta pieza teatral, Cristóbal Gumucio, director ejecutivo de M100 comparte que: “Matucana 100 viene trabajando con Manuela Infante desde los días en los que presentábamos el repertorio de la compañía Teatro de Chile en nuestros espacios: “Cristo”, “Multicancha”, “Realismo”, entre otros. Hoy, nos parece importante acompañar este nuevo montaje celebrando los 20 años del Centro Cultural con una directora y dramaturga fundamental de la historiografía del teatro chileno”.
Al respecto, Carmen Romero, directora ejecutiva de Fundación Teatro a Mil, sostiene que: ‘Nuevamente luego de ’Estado Vegetal’, esta propuesta de Manuela Infante nos hace reflexionar acerca de los mundos que nos rodean, que muchas veces ignoramos; es una invitación a navegar en mares profundos que nos vuelve a la presencialidad de manera radical”.El espectáculo estará en cartelera hasta el 17 de octubre en el Teatro Principal de M100 y cuenta con todos los protocolos sanitarios exigidos por la autoridad.
Manuela Infante es directora teatral, dramaturga, música y guionista. También es Licenciada en Artes de la U. de Chile y Magíster en Análisis Cultural de la U. de Ámsterdam. Su trabajo es conocido por ofrecer creaciones escénicas que re-articulan asuntos teóricos y filosóficos de contingencia. Con su ex compañía, Teatro de Chile (2002-2016) escribió y dirigió más de diez obras en su mayoría financiadas por el Fondo Nacional de las Artes, entre las que se cuentan: “Prat’” “Cristo”, “Zoo” y “Realismo”.Ha sido merecedora de la distinción “Mejor Obra del Año”, del Círculo de Críticos de Arte de Chile por la obra “Xuarez’ (2015)” y “Estado Vegetal” (2017). Su trabajo ha sido presentado en Perú, México, Argentina, Brasil, Uruguay, Estados Unidos, Alemania, Bélgica, Holanda, Irlanda, España, Italia, Suiza, Singapur, Corea y Japón.El año 2019 fue la primera chilena invitada a la Bienal de Venecia Teatro con ‘Realismo’ y ‘Estado Vegetal’. Ese mismo año, ganó el premio Stuckemarkt de Theatertreffen (Alemania) con su obra “Estado Vegetal’.También ha coproducido su trabajo con Festival Santiago a Mil (Chile), Festival de Modena (Italia), The Watermill Center (EEUU), Theater Bremen (Alemania), Festival Internacional de Buenos Aires (Argentina), TheaterWorks (Singapur) y KVS (Bélgica). Actualmente, está produciendo trabajos con Schauspielhaus Bochum (Alemania), Theater Basel (Suiza), Teatro Nacional de Cataluña (España), M100 (Chile) y FITAM (Chile). Tres de sus obras han sido publicadas en Chile y el extranjero.En 2014 fue la primera mujer en ser nombrada directora artística de la ‘Muestra de Dramaturgia Nacional’ de Chile. Como músico ha compuesto, escrito y producido dos discos con su banda ‘Bahía Inútil’: Stand Scared (2011) y Bahía Inútil (2015). Así mismo ha estado a cargo del diseño sonoro de la mayoría de sus trabajos.Finalmente como guionista ha trabajado en producciones audiovisuales en Chile con reconocidos directores como Cristián Jiménez, Alicia Scherson, Sebastian Lelio y Marialy Rivas; y ha escrito series extranjeras como “Invisible Heroes”, producción de YLE Finlandia.

 

Ficha artística
Dirección y Dramaturgia: Manuela Infante
Elenco: Marcela Salinas, Aliocha de la Sotta, Rodrigo Pérez
Diseño Integral: Rocio Hernández
Jefe Technico y visuales: Pablo Mois
Producción: Carmina Infante
Diseño Sonoro: Manuela Infante
Diseño audiovisual y programación Sonora-lumínica: Alex Waghorn
Coreografía: Diana Carvajal
Colaboraciones Musicales: Valentina Villarroel y Marcos Meza
Con música de Eliane Radigue, Pauline Oliveros, Kali Malone, Senyawa y Beverly Glenn-Copeland
Técnico de Sonido: Diego Betancourt
Diseño Técnico de Sonido: Gonzalo Rodriguez
Investigación teórica y Dramaturgismo: Camila Valladares
Realización escenografía: Amorescénico
Realización utilería: Gabriel Seisdedos – Taller Madrid
Realización vestuario: Daniela Espinoza