Jesús Urqueta se sumerge en drama policial

Uno de los crímenes más espeluznantes del popular asesino serial estadounidense inspiró al guionista Keith Huff (“House of Cards y Mad Men”) para escribir esta tragedia contemporánea sobre la lealtad, la corrupción y la ética, que se presenta del 6 al 29 de enero en la nueva sala Zoco, de Lo Barnechea, en una versión dirigida por Jesús Urqueta (“Arpeggione”). Estrenada en Broadway en 2010 en una exitosa producción con Hugh Jackman y Daniel Craig, la puesta en escena local está pensada como un plano secuencia que alterna temporalidades, escenarios y atmósferas para contar la historia de dos policías de Chicago y amigos de la infancia que cometen un grave error que acaba con sus carreras y su amistad.
En 1991, Jeffrey Dahmer invitó a Konerak Sinthasomphone, un joven de origen vietnamita de 14 años, a su apartamento en Milwaukee, Estados Unidos. Lo drogó y planeaba inyectarle ácido en el cerebro, pero el chico logró escapar: cruzó desnudo y aturdido los pasillos del edificio, los vecinos llamaron a la policía y dos agentes se dejaron caer en el lugar. Aún bajo el efecto de los sedantes, el menor decía solo incoherencias que no daban pistas de lo que sucedía. Al volver y presenciar la escena, Dahmer aseguró que Konerak era su pareja, los uniformados le creyeron y se fueron sin revisar su departamento, donde el asesino serial estadounidense –y protagonista de la exitosa y reciente serie de Netflix– mantenía oculto el cadáver de una de sus 17 víctimas. La equivocación de ambos policías le costó la vida a Konerak, quien fue estrangulado esa misma noche.
Quince años después, el guionista Keith Huff –autor de las series “House of Cards” y “Mad Men”– encontró inspiración en ese escabroso episodio del caso Dahmer y lo convirtió en el núcleo de su siguiente obra, “Lluvia constante”: un drama –en palabras del propio autor– “sobre la lealtad, la corrupción y la ética” que fue producido originalmente en 2006 en el New York Stage and Film’s Powerhouse Theater y estrenado en Chicago al año siguiente.
La obra de Huff despegó con su más exitosa versión en Broadway, donde debutó en 2010, en el Schoenfeld Theatre. La producción estaba protagonizada por Hugh Jackman y Daniel Craig bajo la dirección de John Crowley, y batió –a la fecha– el récord de espectadores semanales en Broadway para una obra teatral no musical.
Al centro de la historia están Denny (Semler) y Joey (Sepúlveda), amigos de la infancia convertidos en dos policías de Chicago de comienzos de la década de los 90. De niños soñaban con ser Starsky y Hutch, pero se encontraron en el lado equivocado de la ley y de sus propias vidas. Denny, el perro alfa, es un hombre de familia tempestuoso y con nociones distorsionadas del honor doméstico y profesional; Joey, en cambio, algunos años menor que él, es un soltero más inhibido y mojigato con problemas con el alcohol.
En días de lluvia constante en Chicago, ambos cometen un grave error de juicio en el ejercicio de su deber que acaba con su carrera y pone a prueba no solo su amistad sino también su escala de valores, sentido del honor y la lealtad.
“Desde la primera vez que leí el texto y que me enamoré de esta historia, la tomé como una tragedia contemporánea”, dice el director Jesús Urqueta.
“La teoría que estamos trabajando desde la dirección es que la problemática de la tragedia contemporánea es la del personaje contra el sistema. Yo les decía a Willy y a César en los ensayos: aquí no hay policías buenos ni malos, son personas dentro de un contexto y de un sistema que se ha vuelto el mayor enemigo o antagonista de estos personajes, además del responsable de que actúen de la manera en que se comportan. Humanizamos el relato: contextualizamos su resistencia, sus conflictos, y no solo entre ellos ni consigo mismos, sino también contra este mismo sistema como uno de los grandes responsables de la tragedia que les toca vivir”, agrega.

Plano secuencia
Ambientada a comienzos de los 90 en un barrio marginal de Chicago, similar al sector donde vivía Jeffrey Dahmer en Milwaukee, la obra se despliega íntegramente en escena en la traducción de Sofía Elizalde y de la mano de un innovador diseño escenográfico y de iluminación a cargo de Tamara Figueroa AS, el vestuario de Loreto Monsalve y el universo sonoro compuesto por Álvaro Pacheco.
“Pusimos en escena el texto completo, con las diversas capas de profundidad que propone y los distintos puntos de relación entre los personajes y con el espectador; y aunque ocurre 100% en esa realidad gringa dura, hay ciertas imágenes, silencios y sonoridades que de pronto conectan con el imaginario cultural latinoamericano y chileno”, dice Urqueta.
Si bien el texto original proponía un determinado número de elementos en escena –la cámara negra, dos sillas y un gran trabajo de iluminación–, Urqueta y su equipo plantearon la acción en dos planos de un mismo contenedor sobre el escenario, en el cual se van revelando progresivamente los distintos escenarios mencionados en la obra de Keith Huff: la casa de Denny, la calle y los bajos fondos de Chicago, una patrulla y un cuartel de policía con su sala de interrogatorio, entre otros.
“Lo que comienza como una historia policial, rápidamente se convierte en un atajo a mundos muy oscuros y perversos. Una obra como ésta puesta en el Chile actual, resulta compleja: hay racismo, hay abuso de poder, policial y un retrato machista de las figuras femeninas. Con Amalia Kassai, la asistente de dirección, hemos hecho un trabajo para contextualizar la época, el lugar y la cultura donde se desarrolla esta historia, y de cómo todo ese mundo, ese orden y ese sistema se convierte en el gatillo de la tragedia que enfrentan estos dos policías”, concluye.

Ficha artística
Dramaturgia: Keith Huff
Dirección: Jesús Urqueta
Traducción: Sofía Elizalde
Elenco: Willy Semler, César Sepúlveda
Asistente de dirección: Amalia Kassai
Diseño de escenografía e iluminación: Tamara Figueroa AS
Diseño de vestuario: Loreto Monsalve
Universo sonoro: Álvaro Pacheco

Coordenadas
Desde el 6 de enero al 29 de enero
Teatro Zoco (Av. La Dehesa 1500, Lo Barnechea).
Viernes y sábado a las 20 horas, y domingo a las 19 horas.